¿Qué es? |
Hoy abrimos una nueva sección en este blog, a través de ella intentaremos informar de algunas pruebas diagnosticas que cada vez se utilizan con mayor frecuencia y que es habitual que los pacientes pregunten por ellas en consulta.
¿Qué es un TAC o Scanner?
El escáner es un aparato que realiza un tipo especial de radiografía, llamada Tomografía Axial Computerizada (TAC). En ella, en lugar de un sólo haz de rayos a través del cuerpo (como en una radiografía normal), se envían muchos haces simultáneamente desde diferentes ángulos, que son analizados con ayuda de un ordenador para combinar las diferentes imágenes del área que requiere el análisis en una sola. No es ni mejor ni peor que otras pruebas, cada una tiene su indicación para las distintas enfermedades que quiere estudiar el médico.
La gran ventaja que aporta el TC es poder visualizar partes del cuerpo que de otra forma no podríamos estudiar; los modernos equipos de TC lo consiguen de una forma muy precisa permitiendo diagnósticos precoces.
La gran ventaja que aporta el TC es poder visualizar partes del cuerpo que de otra forma no podríamos estudiar; los modernos equipos de TC lo consiguen de una forma muy precisa permitiendo diagnósticos precoces.
¿Para qué sirve el TAC?
Un TAC ofrece muchos más detalles que una radiografía corriente, y por lo tanto proporciona al médico mucha más información sobre la anatomía interior del cuerpo, sin tener que recurrir a operaciones o exploraciones desagradables. Con las máquinas modernas la información es procesada para reproducir imágenes tridimensionales del organismo explorado, lo que permite simular lo que encontraría un cirujano durante la exploración. Originalmente, el escáner se diseñó para obtener imágenes del cerebro pero hoy en día la técnica está más avanzada y permite obtener imágenes de cualquier parte del cuerpo. Es especialmente útil para detectar hemorragias cerebrales, aneurismas (dilatación de la pared de una arteria), lesiones cerebrales, tumores y abscesos en cualquier parte del organismo, evaluar diferentes enfermedades pulmonares, descubrir heridas internas o roturas viscerales (riñón, bazo, hígado), lesiones de los huesos y la columna vertebral. El escáner también se utiliza para guiar las biopsias y otros procedimientos invasivos de diagnóstico.
Un TAC ofrece muchos más detalles que una radiografía corriente, y por lo tanto proporciona al médico mucha más información sobre la anatomía interior del cuerpo, sin tener que recurrir a operaciones o exploraciones desagradables. Con las máquinas modernas la información es procesada para reproducir imágenes tridimensionales del organismo explorado, lo que permite simular lo que encontraría un cirujano durante la exploración. Originalmente, el escáner se diseñó para obtener imágenes del cerebro pero hoy en día la técnica está más avanzada y permite obtener imágenes de cualquier parte del cuerpo. Es especialmente útil para detectar hemorragias cerebrales, aneurismas (dilatación de la pared de una arteria), lesiones cerebrales, tumores y abscesos en cualquier parte del organismo, evaluar diferentes enfermedades pulmonares, descubrir heridas internas o roturas viscerales (riñón, bazo, hígado), lesiones de los huesos y la columna vertebral. El escáner también se utiliza para guiar las biopsias y otros procedimientos invasivos de diagnóstico.
¿Cómo se realiza un TAC?
Durante la prueba el paciente está acostado en una camilla, de manera que la zona del cuerpo que se examina quede situada dentro de la circunferencia o abertura del aparato. Esa camilla se mueve hacia delante y hacia atrás controlada por el ordenador, de modo que se pueden tomar las imágenes del cuerpo sin tocar al paciente. La duración de la prueba depende del número de imágenes y los ángulos desde los que se obtengan.
Durante la prueba el paciente está acostado en una camilla, de manera que la zona del cuerpo que se examina quede situada dentro de la circunferencia o abertura del aparato. Esa camilla se mueve hacia delante y hacia atrás controlada por el ordenador, de modo que se pueden tomar las imágenes del cuerpo sin tocar al paciente. La duración de la prueba depende del número de imágenes y los ángulos desde los que se obtengan.
El paciente debe mantenerse relajado y sin realizar movimientos. Se mantiene en contacto con el equipo técnico que está en una sala próxima viendo al paciente y a las imágenes, que se comunica con el paciente por un sistema de megafonía, y que le indica cuando respirar o retener la respiración en el caso de tomografías abdominales o de tórax.
Deben retirarse las joyas y elementos metálicos, requiriendo la utilización de batas o pijamas que eviten las interferencias en el proceso de realización de la tomografía. Siempre debe de informarse al equipo médico de los antecedentes de alergia a contrastes radiológicos.
¿Qué preparación necesita?
Si el estudio se va a realizar con contraste, no deberá tomar alimentos en las últimas 6 horas, aunque sí se pueden ingerir líquidos de forma moderada hasta una hora antes del estudio.
¿Qué preparación necesita?
Si el estudio se va a realizar con contraste, no deberá tomar alimentos en las últimas 6 horas, aunque sí se pueden ingerir líquidos de forma moderada hasta una hora antes del estudio.
¿Dan alguna medicación?En la mayoría de los TC se necesita administrar por vía venosa, habitualmente en el brazo un "contraste", que es una medicación que permite que el estudio sea más preciso. Esta administración puede provocar en casos aislados reacciones alérgicas leves, pero en algunos excepcionales éstas pueden ser graves por lo que siempre se comprueba que se puede inyectar el contraste antes de hacer la prueba. En algunos casos se le solicitará un consentimiento informado.Si hay antecedentes de alguna reacción alérgica, debe señalarse al médico que le solicita la prueba y al radiólogo.En el momento de acudir al Servicio de Radiodiagnóstico, si su estudio es del abdomen, le darán un liquido para beber y así ver mejor el intestino
¿Tiene riesgos someterse a un TAC?
Durante el TAC se utilizan más rayos X que en una radiografía corriente, por lo que los médicos no recomiendan un escáner sin una buena razón. Pese a todo, los niveles de radiación no son elevados. Algunos pacientes pueden sufrir reacciones alérgicas al líquido de contraste que se inyecta en la vena. Más raramente, se produce un daño en los riñones en personas que ya tenían alteraciones renales. Es importante que comunique a los médicos o técnicos si tiene asma, alergia o enfermedades renales antes de someterse a la inyección de contraste.
Durante el TAC se utilizan más rayos X que en una radiografía corriente, por lo que los médicos no recomiendan un escáner sin una buena razón. Pese a todo, los niveles de radiación no son elevados. Algunos pacientes pueden sufrir reacciones alérgicas al líquido de contraste que se inyecta en la vena. Más raramente, se produce un daño en los riñones en personas que ya tenían alteraciones renales. Es importante que comunique a los médicos o técnicos si tiene asma, alergia o enfermedades renales antes de someterse a la inyección de contraste.
Direcciones de Internet donde consultar
http://www.fisterra.com/Salud/3proceDT/tac.asp